Los conductores de las ambulancias privadas en Valladolid sabemos que cuando trasladamos a un enfermo grave, cada segundo cuenta. La rapidez con la que consigamos llegar al hospital puede ser de importancia vital. Unos segundos de retraso pueden llegar a marcar la diferencia entre la vida y la muerte.  Por eso queremos aprovechar este espacio para contarte cómo debes ceder al paso a las ambulancias.

Si estás conduciendo y escuchas el inconfundible sonido de nuestras sirenas y ves por los retrovisores que se acerca una de las ambulancias privadas en Valladolid, debes echarte a un lado, preferiblemente a tu lado derecho, sin arrollar a otros vehículos ni a los peatones. No es necesario que intervengan más ambulancias. También debes echarte a tu derecha si la ambulancia viene en sentido contrario por una vía de doble dirección, puede que necesitemos invadir tu carril para evitar un atasco.

La presencia de una ambulancia no te autoriza a ti a sobrepasar los límites de velocidad, ni a saltarte los semáforos aunque, si fuera la única posibilidad que existe para cedernos el paso puedes hacerlo.

Muchos conductores al escuchar las señales acústicas de la ambulancia apagan la música que estaban escuchando para poner toda su atención en las maniobras que deben realizar y también en las nuestras. La ambulancia suele llegar a tu lado en menos tiempo del que calculas.

Cuando la ambulancia pase a tu lado, no trates de seguir su estela para avanzar más rápido. No es extraño que detrás de una ambulancia venga otra con otro herido o un coche de policía o de bomberos al que tampoco debes retrasar. Gracias a tu ayuda, las Ambulancias Enrique podemos ayudar a mucha gente, tal vez, incluso, a un familiar tuyo.